Estudio Climático Marino Costero de la Pesca Artesanal de Antofagasta (ECMCPAA)

EFECTO DEL NIÑO EN LAS COMUNIDADES DE ORGANISMOS MARINOS COSTEROS

Las macroalgas son organismos fotosintéticos que tienen un papel importante en los ecosistemas marinos. Proporcionan hábitat y refugio para una diversidad de organismos marinos, así como alimento para muchos animales acuáticos. Además, las macroalgas cumplen un papel significativo en la absorción de dióxido de carbono y la producción de oxígeno, contribuyendo a la regulación del clima y la calidad del agua.

Como el Niño provoca que las temperaturas suben en las aguas superficiales puede producir consecuencias negativas para las macroalgas, ya que muchas especies son sensibles a cambios bruscos en la temperatura del agua.

Algunas posibles consecuencias incluyen:
Mortandad y blanqueamiento: El calentamiento del agua puede causar estrés térmico en las macroalgas, lo que puede llevar a su mortalidad o a un blanqueamiento, es decir, la pérdida de pigmentación y vitalidad. Esto puede alterar los ecosistemas costeros y afectar a los organismos que dependen de las macroalgas como hábitat o alimento.
Cambios en la distribución y abundancia: El Niño puede alterar las corrientes oceánicas y los patrones de circulación del agua. Estos cambios pueden afectar la dispersión de las macroalgas y provocar variaciones en su distribución geográfica y abundancia. Algunas especies pueden prosperar en condiciones de El Niño, mientras que otras pueden verse desplazadas o disminuir en número.
Competencia con especies invasoras: En algunos casos, los eventos de El Niño pueden favorecer el establecimiento y proliferación de especies de macroalgas invasoras. Esto puede deberse a la reducción de la competencia con especies nativas debilitadas por las condiciones de El Niño o a la mayor disponibilidad de nutrientes en el agua.
El evento El Niño 1997-1998 afectó profundamente la pradera de Lessonia trabeculata, lo que produjo una pérdida de cobertura y biomasa mayor al 80% de la especie. Grupos discretos de plantas adultas sobrevivieron a profundidades mayores a 12 m, a partir de los cuales se habría inducido la formación de una pradera joven (Llellish, M. 2020)
A nivel de paisaje costero, una de las consecuencias biológicas de mayor frecuencia durante la manifestación de un evento de El Niño en el litoral del Pacífico americano es la extinción de praderas de algas pardas Laminariales, huirales (Vásquez, 1990; Camus, 1990, 1994a, 1994b; Ladah et al., 1999; Dayton et al., 1999).
Durante el evento El Niño 1997-1998, las poblaciones de Macrocystis y Lessonia fueron afectadas, disminuyendo sus niveles de abundancia, pero debido a la intensidad de este evento, se reestablecieron rápidamente por reclutamientos masivos (Vásquez, 2000).
Por otra parte, para las costas de Antofagasta, se han registrado procesos de extinción local como ha sido descrito para otros eventos El Niño (eg.1982-1983; ver Soto 1985 y Camus 1994a, 1994b)
Camus y colaboradores, demostraron entre otras cosas que los patrones biogeográficos de las macroalgas a lo largo de la costa chilena-peruana son explicados por ENSO. Al respecto, Castilla & Camus 1992, indican que El Niño de 1982-83 cambió los patrones de explotación de 3 recursos marinos bentónicos para los humanos. Y que El Niño de 1982-83 resulto la extinción local de especies de algas dominantes de muchas localidades, mientras que la recolonización fue baja en zona norte de Chile. Por otra parte, Camus & Martínez 1995, señalan que El Niño de 1982-83 afecto la riqueza de especies, dominancia de especies, y densidad de algas bentónicas e invertebrados en las costas de la zona norte de Chile.